Infección por citomegalovirus
Escrito por nuestro Equipo de Profesionales Médicos
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Resumen
La citomegalovirosis (CMV) es una infección que usualmente afecta el tracto respiratorio. El citomegalovirus es un virus común que no suele presentar síntomas en personas sanas, sin embargo, las personas con sistemas inmunitarios débiles pueden enfermarse gravemente si contraen el citomegalovirus. El virus puede propagarse mediante sangre, saliva o contacto sexual. Los síntomas principales incluyen fiebre, ganglios linfáticos agrandados, dolores musculares y dolor de garganta. Por lo general la condición se resuelve por si misma entre 4 a 6 semanas, aunque las personas con un sistema inmunitario débiles pueden necesitar un tratamiento activo del virus para prevenir complicaciones a largo plazo.
Riesgos
La citomegalovirosis es una infección muy común y casi todas las personas la pueden padecer en algún momento de su vida, por lo general durante la infancia, aunque también es posible contraer el virus por primera vez en la adultez. Luego de infectarse, el virus permanece en el cuerpo y puede reactivarse si el sistema inmunitario se debilita. Las personas con algunas condiciones médicas tales como VIH/SIDA o leucemia, o que toman medicamentos que pueden provocar problemas inmunitarios (como luego de un trasplante de órganos), tienen riesgo de una recurrencia del virus y presentar síntomas severos. Las mujeres embarazadas que nunca tuvieron una citomegalovirosis corren el riesgo de pasarle el virus al bebé antes de nacer (feto).
Síntomas
Los síntomas típicos envuelven fiebre, una sensación de malestar general, pérdida de apetito, dolores musculares, sarpullido y dolor de garganta. También puede causar dolor de cabeza, tos, dolor en el pecho, dificultad para respirar, urticaria, ictericia, problemas de visión y rigidez en el cuello.
Diagnóstico
El diagnóstico suele hacerse tomando una muestra de sangre para detectar la presencia de anticuerpos (proteínas que combaten las infecciones) creados por el sistema inmunitario al ser expuesto al citomegalovirus. Otros estudios pueden buscar la presencia del citomegalovirus en la sangre y otros fluidos corporales.
Tratamiento
Las personas con un buen sistema inmunitario por lo general no requieren ningún tratamiento. Los medicamentos para aliviar el dolor de los músculos y hacer gárgaras con agua salada para aliviar el dolor de garganta pueden ser de ayuda. Las personas con un sistema inmunitario débil a menudo necesitan medicamentos antivirales para combatir el virus y disminuir la gravedad de las complicaciones.
Prevención
No existe vacuna para el citamegalovirus, pero las infecciones pueden prevenirse manteniendo una buena higiene (como lavarse las manos frecuentemente y evitar entornos sociales cuando se está enfermo) y evitando el contacto cercano, los besos o el contacto sexual con personas infectadas. Las personas con un sistema inmunitario débil deben estar alertas a señales de infección (fiebre, tos, etc.) y hacer una consulta médica lo antes posible.
Pronóstico
La infección por el citomegalovirus suele resolverse por sí misma y sin tratamiento dentro de las 4 a 6 semanas, sin embargo, el virus permanece en el cuerpo y puede causar síntomas cuando el sistema inmunitario se encuentra débil. Las personas que tienen un sistema inmunitario debilitado corren más riesgo de presentar complicaciones tales como neumonía, lesiones en el ojo, hepatitis e inflamación del sistema nervioso, entre otras. Las mujeres embarazadas que contraen el citomegalovirus por primera vez corren el riesgo de pasárselo al feto (bebe que aún no ha nacido), lo que puede causar graves consecuencias para el bebé, incluyendo la muerte.